Febrero es por excelencia el mes del amor. La celebración del día de San Valentín es una excusa para tener un detalle especial con los que más queremos, pero a veces la víspera del 14 de febrero se convierte en un pequeño quebradero de cabeza ante la búsqueda del regalo perfecto que aúne originalidad, presencia, buen gusto y… buen precio.
La sobredosis de amor despierta nuestro instinto más dulce, y dónde mejor que en la Pastelería Ascaso para encontrar auténticos flechazos con los que conquistar por el estómago a todo tipo de dulcívoros, desde los acostumbrados a degustar chocolate tradicional hasta los ávidos de nuevas combinaciones de sabores que enamoran.
Ascaso ha apostado este San Valentín por crear unos bombones con forma de corazón que están buenísimos… En su interior equilibran la fuerza del cacao con fresas naturales y la suavidad de la leche; su exterior es una crujiente cobertura de chocolate con fresa elaborada con la gama ‘Inspiration’ de la casa chocolatera francesa Valrhona.
El resultado es 100% natural y deslumbra a los sentidos… también desde el packaging: una estilizada caja alargada de sofisticado color negro que deja ver los catorce bombones que contiene. Desde el 1 de febrero y hasta el Día de los Enamorados estarán disponibles en la pastelería online de Ascaso.
Si quieres sorprender, acompaña la caja de bombones con un mensaje especial que derrita al destinatario, pero también son perfectos para compartir con familia y amigos. Puedes sacarlos de su envoltorio y colocarlos sobre un soporte que cause tanta sensación como los pequeños corazones, algo que también facilita Pastelería Ascaso. En sus establecimientos dispone de múltiples bases para presentar los productos, que van desde vajillas de diferentes estilos hasta cajas decorativas reutilizables. Para brindar por su sabor, nada mejor que maridar los bombones con vino, una experiencia de contrastes que Ascaso ya ha comprobado en otras ocasiones con sus chocolates.
Más allá de bombones y chocolate, el amor me transporta a París, su Torre Eiffel y sus macarons. Los de Ascaso son probablemente los más auténticos del mercado, ya que prescinden de colorantes y son completamente naturales. Para San Valentín elaboran uno con forma de corazón (¡el macaron-corazón!), con cobertura rosa y dos interiores: el primero contiene chocolate rubio Dulcey y el segundo una ganache de frutos del bosque. Son perfectos para compartir, ya que su tamaño cuadriplica al de un macaron tradicional, y los puedes encontrar en los establecimientos físicos de Ascaso.
También estará disponible en las pastelerías el bautizado como pastel de San Valentín, un corazón rojo elaborado con la misma cobertura crujiente de los bombones de inspiración fresa. Los amantes de sabores más clásicos disfrutarán de su interior, compuesto por bizcocho de cacao al 70% y crema tostada.
Si eres de los que prefieren esperar al 14 de febrero para regalar, Ascaso también está preparando dos detalles especiales exclusivos para ese día. El primero, se trata de un hojaldre con forma de corazón y fresas naturales; el segundo, un clásico por excelencia: la tarta sacher moldeada como un corazón.
¡Mucho amor para todos!