Pan de San Lorenzo: el dulce por excelencia de las fiestas laurentinas

Un postre inspirado en el arraigo a la tierra, sencillo, agradable para todos los paladares y asequible para todos los bolsillos. Esas fueron las premisas sobre las que trabajaron Vicente Ascaso, propietario de Pastelería Ascaso, y Antonio Oliván, el entonces maestro pastelero de la compañía, después de percatarse de que no había un postre típico para conmemorar San Lorenzo. Fue así como nació el Pan de San Lorenzo, un dulce esponjoso y sobrio, que llegó por primera vez a nuestros mostradores en 1970 y que, en la actualidad, se ha convertido en un dulce indispensable de los hogares oscenses durante las fiestas laurentinas.

 

Harina, levadura, leche, mantequilla, frutas confitadas, pasas, azúcar, naranja y limón son los ingredientes de este sencillo postre de masa tipo brioche, que, además, combina a la perfección con todo: desayuno, postre, merienda,… De hecho, además de su delicado sabor, otra de sus características es su buena conservación (aunque la mayoría de sus seguidores lo suele preferir recién hecho).
Pan de San Lorenzo Ascaso
Y aunque sus ingredientes son muy básicos, su elaboración es compleja. Y es que el proceso de fermentación del Pan de San Lorenzo es largo, ya que se consigue de manera lenta y a baja temperatura. Lograr ese característico y esponjoso punto de amasado requiere de mucha delicadeza. Tras su cocción, se pinta con gelatina para que se adhiera mejor el azúcar que se espolvorea por encima.

 

Recuerda que este clásico de la repostería oscense, sólo se puede disfrutar en el mes de agosto. Para hacerlo, únicamente tienes que pasarte por nuestros establecimientos de Huesca y Zaragoza, donde lo encontrarás en dos tamaños. Descubrirás que no hay mejor manera de conmemorar San Lorenzo.
Share on FacebookTweet about this on TwitterPin on Pinterest